viernes, 19 de diciembre de 2014

Armagedon


ARMAGEDON

         El alba despuntaba frío y gris, cómo la mayoría de las mañanas de aquel final de otoño. La humedad se colaba hasta los tuétanos por las antiguas ventanas de mi despacho donde pasaba las noches desde que Stephany me había abandonado. Encendí un cigarrillo mientras vaciaba los restos de una botella de Johnny Walker en una taza y después terminaba de rellenarla con el café frío del día anterior. “El desayuno de los campeones” pensé, y media sonrisa asomó en mi rostro al tiempo que miraba a la calle desde mi ventana. La calle era un erial a esas horas, tan solo un barrendero recorría con su escobón el desierto humedecido por el sirimiri matutino. De la degustación de la esquina, con los cristales empañados y la decoración navideña iluminando el interior, salía una fina cortina de vapor con la que se escapaba el calor. Todo normal, un día normal, sin embargo yo tenía un mal presagio. ¿Sería la calma que precede a la tormenta?

            Salí al rellano a recoger el periódico mientras me ponía los pantalones, y entonces, en el instante en que me senté en el despacho dispuesto a leer el periódico, de pronto lo vi todo claro;

-Europa reconoce al Estado Palestino
-Guerra financiera contra Rusia
-Hamás ya no es considerado grupo terrorista por la UE
-USA establece relaciones con Cuba y reconoce la ineficacia del bloqueo.
-El Vaticano permite que se juzgue a curas por pederastas
-El PP sigue gobernando en Españistan a pesar de su ineptitud
-Dimite Torres Dulce
-Un Jefe antidrogas es detenido por tráfico de estupefacientes.
-Detienen a un antidisturbios muy borracho (por su mala conciencia, seguro) y que condujo en dirección contraria durante 15 km...

            Todas esas pruebas me tenían descolocado y nervioso, algo gordo se estaba cociendo y no era capaz de averiguar que era. Me sentía frustrado. ¿Estaba perdiendo mi olfato como investigador privado? ¿La coca que había destrozado mi tabique y había sido mi sustento investigador me había abandonado? Pero entonces lo vi claro, estaba allí, en la portada de aquel periódico, había encontrado la clave de bóveda, ya podía unir los puntos y todo quedaba claro.

-EMPRESARIO ARRUINADO ATACA CON SU COCHE LA SEDE DEL PP EN GENOVA

            En silencio me recosté sobre mi raído sillón, aspiré una fuerte calada a mi cigarrillo y di un trago a mi café... El apocalipsis. La verdad es que llegaba en buen momento, la vida estaba siendo un poco monótona ultimamente....

martes, 25 de noviembre de 2014

La sangre caliente de mis manos


LA SANGRE CALIENTE DE MIS MANOS

            Dicen los medios que nadie podía esperar un comportamiento así, que era un tío normal, que incluso hay quien afirma que iba a Misa todos los domingos. Un buen trabajador, una buena persona afirman, pero de sus manos cae aún un hilo de sangre caliente, porque la sangre vende en prime-time.

            Una vez al año colocamos puntitos lilas en nuestras ventanas y dormimos con tapones de algodón en los oídos para no escuchar a los vecinos. Nos concentramos ante las instituciones y en la calle, porque las concentraciones limpian nuestra conciencia, y de nuestras manos cae aún un hilo de sangre caliente.

            Hoy hablamos de acabar con una “lacra” que siega la vida de centenares de madres, compañeras, amigas, y mañana cuestionamos los datos y equiparamos balanzas, y desestimamos realidades, porque “ellos” también son víctimas. Curiosa balanza desequilibrada, donde las excepciones son portada y el problema una nota a pie de página. Y de las manos de los editores cae aún un hilo de sangre caliente. Porque el hombre que muerde al perro bien merece un titular.

            Y mientras todo esto ocurre, miles de asesinos recorren nuestras calles, nuestros paseos, nuestros bares, impunes, mientras de sus manos cae aún un hilo de sangre caliente, y compran gafas de sol en invierno para sus amantes-esposas.

            La prevención no existe, y seguimos por la senda de la superioridad de Genero. Estereotipamos comportamientos androcentristas. Reproducimos la cultura del masculino singular. Escondidos en cifras, porcentajes, desigualdades, encasillamientos, y especializaciones. La sociedad es la culpable que yo no soy así, que la quiero, pero se empeña en llevar esas faldas tan cortas, y provocan, y me seducen, y me violan, y uno no es de piedra, y de mis manos cae aún un hilo de sangre caliente.

            Y cuando la amenaza deja de ser verbo, entonces victimizamos a la victima, la señalamos, la apartamos, le damos una nueva vida porque la suya la perdió por libre elección. Ellas son las culpables, culpables de si mismas y las protegemos como protegemos a los corderos de los lobos, entre alambradas, con perros guardianes. Las desarraigamos de la sociedad y las obligamos a renacer, mientras el asesino sigue yendo tranquilo de la casa al trabajo, paseo por el bar, y gritos de acera a acera. PUTA. Y lo vemos mientras de nuestras manos cae aún un hilo de sangre caliente.

            Y el lobo es conocido, sabemos donde vive, pero él no tiene seguimiento, ni es señalado, ni acusado, ni sufre desarraigo, ni pierde su pasado, y sino empuña un arma y olvida la orden de alejamiento, todo quedará para él en un mal trance que olvidará mientras busca una nueva oveja. Un separado más, un divorciado con rencor. Y la ruleta girará nuevamente mientras de sus manos cae aún un hilo de sangre caliente.

            ¡Ay de nosotros, sociedad enferma! 39 denuncias acumulaba el agresor, ¿Cómo íbamos a saber que se atrevería a saltarse una orden de alejamiento? Caerá la Justicia con todo su peso sobre él, pero ella está muerta, hoy lo lamentamos tras una pancarta, bajo la lluvia para mayor teatralidad, y de la pancarta, hoy también, cae aún un hilo de sangre caliente.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Cerillas y gasolina


CERILLAS Y GASOLINA

            Sin duda el título de hoy podría servir para nombrar alguna canción de reggeton, pero a ti, avispada lectora, o lector, no se te pasa que no van por ahí los derroteros de esta post. No, esta es la fábula de la cerilla y la gasolina, esa que tiene como protagonista a un inefable Alcalde de ciudad media y a su escudero, el Diputado General, secundario con ínfulas. Personajes singulares sin duda.

            Vividores de extraño pasado que tan pronto viajan con cien mil euros cual calderilla en el bolsillo, como firman contratos de arrendamiento de “a duro las cuatro pesetas” para el arrendador, suponemos que por devoción a San Antonio. De linaje derechoso, marca su blasón una gaviota, o albatros, sobrevolando campo azul. Linaje de rancio abolengo desde antiguos Ministros de Gobernación e inauguraciones de pantanos, donde la corrupción es un don y no una traición.

            Caballero y Escudero viéndose perdidos y derrotados por hordas de ciudadanos descontentos con su servil actuación frente a Madrid y su inacción de gobierno que ha situado Álava como líder en paro, y ha desatendido las necesidades de sus conciudadanos, al grito de “Voto a Bríos” decidieron iniciar una Cruzada contra los “de allí” alimentando las vísceras de los “de aquí”. Seres mitológicos ambos ya que uno o una es de donde vive, pues ahí está su sustento, y quién hoy enarbola la bandera de los “de aquí” mañana puede ser migrante en Alemania, Suiza o Ecuador.

            Sin embargo pareciera que les salió bien la jugada, y mesnadas de “miserables” abrazaron el credo de las Cruzadas dispuestos a descuartizar las almas de quienes aún son más “miserables” que ellos. Creyéndose todos a un tiempo Jean Valjean y Javert olvidaron a los grandes ladrones y atacaron en manada a los más débiles adversarios, a quienes no defienden corazas ni ejércitos. Y la Historia nos ha demostrado, a lo largo de miles de años, que cuando se entrega un arma, ésta, siempre busca la sangre.

            Nuestros protagonistas viéndose a lomos de briosos corceles, desempolvaron armaduras y siguieron regando el odio con gasolina, quizá unos votos más les permitieran salir del fango, volver a la contienda y quien sabe si retener el castillo y villa de Gasteiz. La gasolina es barata y encuentran en “El Correo” la refinería perfecta. Todo marcha viento en popa aunque la Oposición les acorrale, aunque los movimientos sociales les critiquen, Ellos caminan hacia el Oeste, “Mas madera” es su lema.

            Pero la gasolina es altamente inflamable, y el fuego, ya se sabe, no es fácil de controlar cuanto es desbocado. Basta una cerilla y estará todo preparado. Las chispas por la ciudad hace tiempo que se iniciaron, y el ambiente se caldea por momentos. Sin embargo, nuestros intrépidos protagonistas no cejan en su empeño, e interpelados por las primeras agresiones responden al unísono, ¡Nosotros no somos culpables! ¿Acaso repartimos las cerillas? Y se recuestan en sus tronos a tocar la Lira para observar como arde Roma y sortear culpabilidades entre los cristianos.

viernes, 24 de octubre de 2014

¿Podemos? II Parte


¿PODEMOS? II parte

         Allá por febrero escribí un post con este mismo título, y en aquel momento, que parece que fue hace una eternidad, el fenómeno Podemos era una total y absoluta incógnita. Venía yo a decir que, con sus luces y con sus muchas sombras, desde Euskal Herria no podíamos sino alegrarnos de que el desencanto y la indignación empezaran a tomar forma allende el Ebro. Incidía en que una formación de izquierdas que pudiera aglutinar las ansias de lucha con el objetivo de conformar una mayoría hegemónica siempre es una buena noticia para la clase trabajadora. Y uno, que parece que a pesar de mis 41 años no aprendo, confiaba en estar asistiendo al nacimiento de la Siryza hispánica, o quizás el Frente Amplio Uruguayo, no sé, por citar algunos ejemplos. Sin embargo, estamos en octubre (gran mes en las onomásticas para los que somos zurdos) y casi después de un largo embarazo se puede empezar a discernir, cuanto menos, el sexo del futuro vástago, pero ni por esas, ni chicha, ni limoná, ni ná de ná.

            Cuanto más cerca se halla el ciclo electoral de 2015, Podemos más aligera su mensaje, más suaviza sus palabras y más busca la retórica hueca con la que llegar a una mayoría amplia de la población, sin percatarse, o haciéndolo lo que aún sería peor, de que mayoría amplia no significa mayoría hegemónica. Y no lo es, ni lo será porque la búsqueda de una victoria electoral rápida, sin periodo de confrontación previo que permita realizar una labor pedagógica conlleva irremediablemente la necesidad de abandonar objetivos ambiciosos para no “asustar” a las masas. Así, de un tiempo a esta parte uno puede escuchar a Pablo Iglesias hablar del derecho de autodeterminación de los pueblos al tiempo que se permite en lo interno exigir que voten todos los círculos de España la posición que han de mantener los círculos catalanes respecto al proceso de secesión. Es fácil oírles decir que Podemos no es de izquierdas ni de derechas, que son los de abajo y van contra los de arriba, y hay que reconocer que la frase es redonda, pero no es lo mismo confrontar con los de arriba desde la izquierda que hacerlo desde la derecha, y asumámoslo, el centro es una necedad. O con el pueblo, o contra el pueblo, no hay termino medio, y sino, miren a donde nos han traído las reformas social-demócratas.

            Aún con todo lo anterior, sigo creyendo que la noticia de la irrupción de Podemos en el panorama político tiene muchas virtudes. La primera y fundamental a mi entender, el haber logrado generar ilusión en un sector de la población profundamente desencantado, y haber logrado inmiscuir en la vida política a personas que de otra manera parecía imposible lograr que aceptasen ese reto, aunque también es cierto que no serán pocos los que se desencanten más pronto que tarde si continúan por estos derroteros. La segunda gran virtud es que el nacimiento de Podemos sitúa, tanto a PSOE como a IU ante el espejo de la realidad, y el reflejo parece que no está gustando a ninguno de ellos, están gordos, fofos, sin capacidad de reacción, tirados en el sofá acostumbrados a su cómoda vida dentro del sistema, pero no tienen otra opción que regenerarse o morir, aunque creo que las horas de gimnasio necesarias son excesivas, sobre todo en el caso de unos socialistas que ya no encuentran las cazadoras de pana ni aunque las busquen, y eso lo saben Pablito y los suyos, y mucho me temo que es ese espacio el que pretenden ocupar, desatendiendo la confrontación, y pasando por su propio Suresnes.

            A pesar de todo, la hipotética irrupción de Podemos en el panorama político de Euskal Herria, en mi opinión tendrá un efecto diferenciador con el Reino, y ese no es otro que la existencia de EH Bildu, referente indudable para buena parte de la población de izquierdas y transformadora. La existencia de dos bloques claros y nítidos (PNV, PSE y PP por un lado y EH Bildu por el otro) le obligará irremediablemente a tomar posición, no valdrá en EH eso de ni izquierdas ni derechas, tendrán que tomar partido, o con la “casta” o contra ella y por tanto buscar puentes con EH Bildu. Claro que siempre queda enarbolar lo identitario como diferenciador y recuperar aquello del 5º espacio... ¿lo recuerdan? Yo tampoco

martes, 14 de octubre de 2014

La alegria del miserable


LA ALEGRIA DEL MISERABLE

         Nos han hecho creer en el sueño americano. Sueño que curiosamente no nació en USA sino que probablemente tenga su inicio con el nacimiento de la tesis liberales y la propia revolución industrial en la rancia Europa. Una mentira repetida a modo de mantra. La leyenda del hombre forjado a si mismo, que saliendo de la más absoluta de las miserias termina siendo dueño de un imperio. Ejemplos y pruebas por doquier. Centenares, miles. Leyendas limpias de polvo y paja, no porque no existieran sino porque el polvo y la paja son borrados por los vientos de la memoria y las plumas estilográficas de los voceros que al sueño no le faltaron ni le faltan.

            En esta fantástica historia de campeones no faltan vencidos, miles, cientos de miles, millones, pero como los muertos de un campo de batalla, estos no tienen sino una lápida o una miserable cruz de madera. No hay letras doradas para quienes fallecieron forjando la fortuna de Henry Ford, o construyendo la Torre Eiffel. Por supuesto, quienes murieron de hambre en la Gran Depresión del 29 no son recordados, o al menos no más allá de una estadística, aunque nadie olvide a los Kennedy que se lucraron en aquellas fechas. “Hijo, estudia para ser alguien en esta vida” nos dicen nuestros progenitores en nuestra infancia y nos ocultan que las paredes de la pirámide a la que hemos de subir son resbaladizas, y que algunos iniciaremos el ascenso desde abajo y descalzos mientras otros, lo harán casi en la cumbre y con crampones.

            A sangre nos venden la lotería como normalidad, y con la esperanza verde sobre nuestros hombros nos olvidamos de la injusticia, y asumimos la pirámide, e igual que si de una tabla clasificatoria se tratara, miramos todos los lunes los resultados esperando vernos en media tabla, o clase media. Porque ya hace tiempo que nos desmontaron aquello de los de arriba y los de abajo, de la lucha de clases, ahora vivimos en una tabla clasificatoria con miles, millones de equipos, y nosotros queremos vernos lejos del descenso. Y entonces se obra el milagro. Al igual que ocurre con los equipos más modestos cuando se encara el final de la liga y uno ya asume que jamás ganará la liga, que la Champions pilla muy lejos, y la UEFA es un sueño irrealizable, entonces el equipo modesto deja de mirar hacia arriba y se preocupa de los resultados de los débiles, y espera cada domingo a que estos equipos pierdan, a que se hundan en la tabla, y celebran sus derrotas como victorias propias.
                                                                                                                                                                    En esas estamos en Gasteiz. Cientos, miles de empobrecidos vitorianos y vitorianas deseando ver como quienes se encuentran aún peor que ellos se hunden y se convierten en fango bajo sus pies. Y mientras eso ocurre, quienes mueven las fichas del tablero, personajes que nunca sabrán lo que es pasar hambre, ni miedo a perder el empleo, ni tendrán problemas a fin de mes, ni se plantearan si podrán pagar la matricula de sus hijos en la Universidad, esos personajes mezquinos y crueles rien desde lo alto de la pirámide, observando como se descuartizan en la arena los cristianos, sin tener, ni siquiera, que utilizar leones.