jueves, 31 de julio de 2014

Alejen su moral y su fe de mi sexualidad

ALEJEN SU MORAL Y SU FE DE MI SEXUALIDAD

Hace unos días leí en un diario digital que en la provincia de Castellón, más concretamente en la localidad de Villafranca del Cid, el Ayuntamiento de dicho municipio denegaba los permisos de apertura a un hotel en cuyo interior se iba a construir una mazmorra para prácticas sadomasoquistas. El motivo de dicha prohibición; no haber aportado toda la documentación requerida para hacer el cambio de propietario. Sin embargo, en un comunicado del Ayuntamiento se deja entrever las verdaderas razones que motivaron dicha denegación; "(El ayuntamiento)... no cree adecuada la existencia de un local de estas características, próxima al municipio y al Santuario de La Mare de Déu del Llosar..."
 Castillo de Roissy. El Hotel de la polémica

¡Con la Iglesia hemos topado! ¡Acabáramos! No voy a decir que me sorprenda que una sarta de frustrados y meapilas actúen de este modo, aunque muchos de ellos sean clientes potenciales de este tipo de establecimientos, y sino os invito a ir a eventos de este tipo que se celebran en clubs liberales, y asociaciones BDSM y observar la cantidad de crucifijos y estampitas virginales cuelgan de cuellos de hombres y mujeres. (Al menos antes de empezar a jugar, que después son un estorbo y un peligro) Pero de lo que sí estoy harto es de su maldita estupidez e infinita hipocresía. 

El BDSM es una práctica sexual consensuada y consentida por las partes, personas adultas que gustan de esas experiencias, y al igual que ocurre con cualquier otra actividad humana es normal que haya gente a la que no le guste, como a mi no me gusta el monte por muy vasco que sea, empero, a mí no se me ocurre prohibir el montañismo. 


Seguro, sensato y consensuado es el lema de quienes practican BDSM

Las personas del Ayuntamiento de Villafranca del Cid utilizan nuevamente la moralidad religiosa para imponer su pensamiento, y se refugian en la protección de no se sabe bien quién para coartar la libertad de otros y otras que no piensan como ellos y ellas. Y estoy cansado. Por ese camino, donde se encuentra situado el hotel, parece ser que pasan muchos peregrinos camino al Santuario, y dicen que entre esos peregrinos hay niños a los que hay que proteger. ¿Proteger de qué? acaso iban a entrar al hotel de peregrinación. De ellos, de la cultura Católica es de lo que debiéramos proteger a nuestros niños y niñas, sin embargo los católicos pasan por allí cada 8 de septiembre en procesión con imágenes de santos y vírgenes dolorosas y torturadas. Todo eso está al alcance de las mentes maleables y en formación de niños y niñas sin que por ello nadie ponga el grito en el cielo.

Y es que, que alguien practique esto en privado, en un hotel;

Karada sencilla de Shibari

Es sin duda mucho más pecaminoso e inmoral que practicar esto públicamente bajo la atenta mirada de hombres, mujeres y niños;

Crucifixiones de Semana Santa (Filipinas)

Por supuesto, que alguien acepte voluntariamente ser azotado, nalgueado, o cualquiera de las vertientes del spanking;


 Es sin duda una depravación que hay que perseguir, mientras estos otros Señores, son venerados en sus respectivos pueblos;

Los Picaos, Semana Santa, (San Vicente de la Sonsierra)

Y así podríamos seguir hasta el infinito, hablando de las practicas Opusianas, cilicios incluidos, de las imágenes presentes en los templos católicos,

San Sebastian Mártir

sin embargo eso está dentro de su derecho al culto, y yo me tengo que aguantar. Tengo que esquivar sus procesiones en Semana Santa, soportar que corten el tráfico para que pasen los "arrodillados", huir del centro en las fiestas patronales para no ver la procesión de los faroles. En todas las esquinas acecha una cruz con un hombre sufriendo y sangrando, pero lo peligroso para la moral, lo peligroso para las gentes de bien es lo que unas personas adultas deciden hacer en privado con su sexualidad. 

El hotel parece que ya no abrirá sus puertas, y tras ellas, cerradas, tampoco podrán los castellonenses dar rienda suelta a sus deseos, otra victoria para la moralidad cristiana, para la reserva espiritual de occidente, para la España de Rouco y Munilla, de Gallardón y de Fernández Díaz.  Una nueva victoria para la hipocresía. 

VIVIMOS EN UN MUNDO DONDE NOS ESCONDEMOS PARA HACER EL AMOR, PERO LA VIOLENCIA ES PRACTICADA A PLENA LUZ DEL DIA. John Lenoon.

jueves, 24 de julio de 2014

Maroto no tiene quien le escriba


MAROTO NO TIENE QUIEN LE ESCRIBA

         En la soledad de su despacho, frente a la gran mesa escritorio de maderas nobles que lo presida, el Regidor del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz se amarra a su makila mientras solloza desconsolado. ¡Qué incomprendido se siente! ¡Cómo le duelen los comentarios de sus conciudadanos! No le entienden, no le comprenden. Y llora. Lágrimas de cocodrilo, por supuesto. Lamenta en la prensa, que es donde los Grandes hablan con el pueblo, que existan Gasteiztarras que le consideren racista, que piensen que es racista, ¡Que lejos de la realidad! Él sabe que no es racista, tal vez populista, sí, mucho, y clasista, claro que es clasista, ¿Cómo es posible que existan los pobres para deslucir Su ciudad?

         Maroto está triste y para levantarle el ánimo vienen a socorrerlo mesnadas de Peperos, y a su frente, cual caballero andante, brazal refulgente, y pendón cruzado aparece otro Javier que tal baila, en este caso de Andrés, el Diputado. Entre ambos están dispuestos a dar batalla y ganar esta Cruzada. Tampoco éste prócer alavés es racista, ni xenófobo, simplemente sentimental, y en fechas de Santiago, rememora aquel ¡Cierra España! Pero a los pobres claro, no vaya a venir algún jeque y lo malentienda.

         Los pobres no son bienvenidos en esta ciudad, y aún lo son menos si vienen de otra frontera. No mienten, aseveran, simplemente los datos no les dan la razón, ¿Pero qué importa la verdad cuándo hablamos de sentimientos? Tiremos de ellos pues. Utilicemos los bajos instintos. No haya miedo a las consecuencias.

         Dicen que los magrebís vienen a vivir de las ayudas públicas, y los datos, los fríos datos les desmienten. Dicen que defraudan con las ayudas, y prefieren decirlo antes que perseguir el posible fraude. Se escandalizan por pequeños fraudes que toda la población quiere que se persigan, y callan, guardan silencio ante los robos perpetrados por su camarilla, 11.600 millones de Caixabank incluidos. Minucias, el Sistema funciona, solo sobran los pobres. Y cómo sobran cargamos ahora contra la población migrante nigeriana, y repiten argumento, esta vez aseverando que el 70% vive de la RGI. No se integran, braman, basados en ese dato. Y yo entiendo ahora por qué lógica mantienen en el imaginario que los andaluces son vagos, tienen un 35% de paro. Pero ay Dios, si eres andaluz y joven, el 65% no trabaja. Y entonces se les ve la costura. ¿La solución? Endurecer el acceso a las ayudas. ¡Que se mueran de hambre o se vayan!

         Pero no es racismo ni xenofobia, claman ofendidos, mientras siembran odio y lo abonan de populismo. Y yo, triste y compungido ante sus lágrimas no veo el momento de que acabe su sufrimiento, que lleguen las elecciones y los echemos de cualquier parlamento.

         Permítame una última cosilla Sr. Maroto, si de sus semillas de odio nacen y crecen aguilas y fascismo, si sus palabras sirven de excusa para descerebrados, no llore ante la prensa mientras brinda por un puñado de votos.

viernes, 18 de julio de 2014

La distopía palestina


LA DISTOPÍA PALESTINA

            La distopía o antiutopía es una sociedad ficticia indeseable en sí misma. Esta sociedad distópica está presente en muchas novelas, ensayos, comics e incluso en el cine de Hollywood. Este género surge a mediados del siglo XX, tras el final de la II Guerra Mundial y son sus máximos exponentes; 1984 de George Orwell, Fahrenheit 451 de Ray Badbury o Un mundo feliz de Aldous Huxley entre otros, sin olvidar la oscura y tenebrosa Gotham City una ciudad distópica como pocas donde el hombre-murciélago realiza sus proezas.

            Todas estas distopías se caracterizan por crear un ambiente irrespirable de control y manipulación, un ambiente y una vida oprimida, sin futuro, gris cuando no directamente negra. Sin embargo, si la definición teórica, tal y como escribo al abrir este post, habla de una sociedad ficticia, lo cierto es que, mientras George Orwell escribía 1984, una distopía real y tangible estaba naciendo en Oriente Próximo, porque, ¿Cómo catalogar la vida que sobreviven quienes se hacinan en la minúscula franja de Gaza? Y esa distopía ha nacido y ha crecido al albur del Estado de Israel.

            Estoy seguro que si preguntásemos a la mayoría de personas de este malnacido Orbe cual es la región del planeta más poblada la respuesta danzaría de China a la India, a recordar imágenes de Calcuta, Delhi o Shangai. Nos imaginaremos en sus calles, atestadas de personas conviviendo en un caos de tráfico, comercio, barullo. Sin embargo nadie, o casi nadie pensará que Gaza pueda ser la región más poblada del planeta. Es más, les costará encontrar un documento oficial que así lo corrobore, y eso se debe a que Gaza, Palestina entera no tiene trato como Estado, sin embargo la realidad es tozuda, es cierta y es desoladora, en una franja de 360 km2 conviven más de 1,6 millones de almas. Para que se hagan una idea, en un territorio poco más grande que el Condado de Trebiñu debería residir casi la totalidad de la población de la CAV.

            Y puestos a seguir comparando imaginen ahora que toda esa población no puede hacer edificaciones nuevas desde hace más de 20 años ya que el Estado de Israel bloquea la entrada de materiales de construcción. No se pueden hacer depuradoras de agua y el 90% de la misma es insalubre. No hay apenas industria ni terrenos disponibles para la agricultura. (Recuerden que hablamos de Trebiñu con la población de la CAV) Y si esto les parece insuficiente, aderecen con bombardeos y ataques terrestres periódicos por parte del Gobierno Israelí.

            Gaza, en el corazón de la Tierra Santa para Católicos, Judíos y Musulmanes, es la prueba irrefutable de que no hay un infierno después de la muerte, el infierno es simple y llanamente la capacidad del ser humano para humillar, esclavizar, y sacrificar a sus semejantes, y ese infierno tiene un nombre, Gaza.

            Como veis, no he entrado a valorar los últimos acontecimientos, ni los bombardeos indiscriminados ni la incursión terrestre que está teniendo lugar en estos mismos instantes, y que cada letra de este artículo se imprime a la velocidad que una nueva bala surca el aire envenenado de Gaza. Hoy quería hablar de la realidad. Palestina está siendo exterminada como si de una plaga se tratara, y lo hace con el apoyo indisimulado de Occidente, como si nadie recordara ya el Gueto de Varsovia, porque eso es Gaza hoy en día, un gueto donde el sionismo recluye y aniquila lentamente, con sufrimiento, relamiéndose al pueblo palestino. Una distopía real que convierte al Gran Hermano en un virtuoso comparado con Sión.

martes, 8 de julio de 2014

Jenarete y Cortadillo


JENARETE Y CORTADILLO

         La picaresca, o novela picaresca fue un género narrativo en prosa muy característico de la literatura española del llamado Siglo de Oro abandonado, al quedar demostrado, que la realidad siempre supera a la ficción y que a nadie le gusta verse reflejado en un texto burlón. Así, el Reino de España, hogar de pícaros, ladrones y estafadores varios ha llegado a nuestros días sin Cervantes ni Quevedos que lo retraten.

         Han progresado los pícaros, eso sí, ya no son aquellos personajillos de bajo rango social, descendientes de padres sin honor o huérfanos. Siglos de práctica, de saber arrimarse a buenos árboles, les han permitido vestir traje y corbata, arrimar maletín, y ser ejemplo de emprendimiento. No cortan bolsa con navaja, ahora la estafan con acciones y el beneplácito de una corte de aduladores, que incluso del Gobierno los aplauden.  Contraviniendo aquella norma no escrita del pícaro novelado, en la que no cabía mejora en la condición. Han caído en el error Don Gregorio Guadaña o El Buscón.

         Pareciera, ahora bien, que ser pícaro sea profesión noble y artera, viendo como ves a sus oficiantes ocupar los mejores asientos en esta función que es la vida. Los ocupan todos, desde el Gobierno a la Oposición, desde el Santander hasta Gowex.  Y aquí no hay distinción entre las diferentes naciones asentadas en el reino castellano. Ni catalanes ni vascos hacen distinción y De Miguel o Pujol, ITV o TAV, la picaresca lo recorre todo desde el Llobregat hasta el Nervión.

         La última noticia, el último escándalo lo ha provocado un inefable aguador, de aquellos que convierten el agua en vino adulterando el alcohol. De la noche a la mañana descubrimos que era rico, el mayor emprendedor. Loas a su capacidad, a su determinación. Jenarete García (que a quién nombre no tenía, García le ponían) era el espejo de la España audaz, de la desvergüenza. Recuerdos de gomina de aquel intrépido banquero, ejemplo y profesor de economía que piso la cárcel por una estafita en Banesto, y es que no aprendemos.

         Así, tras su meteórico ascenso a la cumbre, en apenas unos días descubrimos que lo suyo era mentira, y que no existía tal dinero. Jenarete había aguado con ¾ de agua lo que nos vendía como litro de vino. Nos rasgamos las vestiduras, algunos incluso nos reímos. O afilamos las guadañas, o nos robaran todo el trigo, bandas de malandrines, rufianes y bandidos, engalanados con Gaviotas, Puños, o ¡voto a Sabino!

         Yo lo dejo aquí, que no quisiera, ofender a ningún pícaro que me leyera, sabiendo como sé que nos rodean y lo que es aún peor, que nos manejan. Hartito me tienen, me roban, se ríen, y para mayor Inri, vas tú y les votas.

sábado, 5 de julio de 2014

Comiendo pollas


COMIENDO POLLAS

         “No juzguéis sino queréis ser juzgados” dice la Biblia para consternación de sus acólitos meapilas. Y yo sin embargo, ateo empedernido, intento seguir tan simple máxima. Es por ello que en cuanto a la sexualidad se refiere, a la sentimentalidad relacional incluso, intento mirar siempre como miro un folio en blanco antes de empezar a escribir, con la envidia de quien observa un mundo de infinitas posibilidades, aunque sea consciente de mis muchas limitaciones y termine escribiendo siempre las mismas historias.

         Viene a cuento esta primera reflexión a consecuencia de una de esas noticias que llenan las páginas de los periódicos en tiempo estival. Una noticia que habla de una “moda”, el mamading, que al parecer hace furor por las islas Baleares y que en recientes fechas ha llegado a estas latitudes de manera que un local Bilbaíno anuncia “fiestas mamading todos los sábados de Julio”, y por supuesto, se abrió el debate.

         Por lo visto esto del mamading no es otra cosa que prometer copas gratis a aquellas mujeres que hagan un mayor y mejor número de felaciones, mamadas o comidas, a cada cual su término. ¡Que han inventado la pólvora, vaya! Pero eso sí, se montó el revuelo. Voces críticas, favorables, de todo hay. Opiniones y argumentaciones varias. Por mi parte no voy a analizar esas opiniones, sino a verter la mía que para eso tengo un blog, ¿no?

         Vaya por delante que el sexo oral es una de las prácticas sexuales que mayor excitación me producen; que me hagan, hacer, con hombres, con mujeres, digamos que es para mí un aperitivo muy interesante antes de ingestas mayores. (Como plato único se me queda un poco corto, la verdad) Y aquí radica mi primer cabreo, que no único, con esto del mamading, resulta que solo se tiene en cuenta la posibilidad de que dichas mamadas las hagan mujeres, y que además se las hagan a hombres, dejando fuera el resto de posibilidades y al resto de candidatos que en un momento dado nos podría apetecer tomar un mojito.

         Ni que decir tiene de que en ningún momento se contempla tampoco la posibilidad de que la buena praxis a la hora de efectuar un cunnilingus reciba el mismo premio.

         Lo que no voy a entrar a debatir es si es correcto o no el pago por mantener relaciones sexuales, quizá en otro momento, aunque adelanto que no soy yo quién va a juzgar a quien con libertad tome esa decisión, no me voy a juzgar a mi mismo, ni a mi pasado. Pero no es de recibo que alguien haga negocio del sexo ajeno. (Tampoco me gustan las plusvalías del trabajo, dicho sea de paso) Y de eso va esto. De eso y de la sumisión sexual establecida de la hembra al macho.

         Lo aberrante de esta moda de pagar copas por comer pollas (mamading para los negociantes) es que ni siquiera es una transacción libre entre dos personas libres en un ámbito de libertad. Se trata de hacer negocio alrededor de esa práctica, desde una visión hetero y patriarcal a más no poder. Ellas son el espectáculo, la atracción, y el reclamo. Las golfas que están dispuestas a chupar una polla a cambio de una copa. Y ellos son los héroes, los que han conseguido que se la chupen por un módico precio. ¡Pasen y vean! A ellas las marcamos, ellos, ellos... en fin. Una prueba aberrante más de un sistema a demoler.

         Pero aviso; que nadie me diga que soy un estrecho, o que coarto la libertad de nadie, al contrario, creo que vivimos en una sociedad de mojigatos y mojigatas, hipócrita hasta la médula. Creo sinceramente y desde lo más profundo de mi ser que el sexo, las relaciones sexuales, son un modo de interactuación más entre los seres humanos y que debiéramos ser capaces de verlo con mayor naturalidad y por eso les propondría un pequeño cambio a esos malnaci... mal llamados hosteleros; en lugar de “mamading” por qué no permitir cualquier práctica sexual en sus locales. Incluso podrían colocar unas camas redondas para facilitarlo.

         Para terminar decir que soy consciente de que muchas personas defenderán el derecho y la libertad de elección de las chicas que decidan acudir a esos saraos, y yo también lo defiendo, el de ellas, el de ellos, el de nosotros, el de vosotras, el de todos juntos, el de vivir una sexualidad libre y placentera, pero esto no va de libertad de elección cuando la elección está hecha. Queremos mujeres sumisas que chupen pollas a chicos en nuestro bar, a la mejor unas copas gratis. Esa es la (s)elección hecha por esos grandes emprendedores, lo demás es; BA SU RA