MEDIDAS EXACERBADAS
Exacerbar;
Del lat. exacerbāre.
1. Irritar, causar muy grave enfado o enojo.
2. Agravar o avivar una enfermedad, una pasión, una molestia,
etc.
3. Intensificar, extremar, exagerar.
Catalunya incomoda, y de qué manera, a los de Dios y las
Leyes viejunas. La marejada desatada en el Mediterráneo está teniendo un efecto
exfoliante que ya quisieran para sí muchas empresas de cosméticos. Pero al
contrario de lo que buscan estas marcas, lo que sale a la luz son las manchas,
las imperfecciones y las costuras. Las del régimen hispano ya eran conocidas
por quienes se han molestado alguna vez en cuestionarse algo en esta vida. La
falta de democracia, la unidad frente a todo, el gusto por las medidas coercitivas
y represivas, no son más que tics de una dictadura que nunca terminó de fenecer
en la cama de aquel hospital madrileño. “El muerto goza de una extraordinaria
salud”. Sin embargo, no por no sospechado, quizá por estos lares sorprenda un
poco más la caída de máscara de algunos que se dicen “nacionalistas” y lo son,
pero sólo de una patria universal, el negocio.
Desde el momento en el que el “Process” puso velocidad de
crucero hacia el 1-O en Sabin Etxea se disparó el consumo de tilas y elevaron la
esquizofrenia habitual a “nivel 5”. Soplar y sorber. Con Dios y el Diablo.
Egibar a Barna, Erkoreka en Moncloa, Urkullu diciéndonos que él ama a su gato.
Pero es difícil contentar a dos “amos”, más cuando ambos están enfrentados,
siempre te obligan a escoger bando y en Jardines de Albia han escogido Madrid
aunque quieran escenificar otra cosa.
En una rueda de prensa reciente, horas previas a la
celebración de la Diada, el exalcalde Gasteiztarra de la triple A, Alfonso
Alonso Aranegui, invitaba a Urkullu a desautorizar las palabras de Egibar
apoyando al pueblo Catalán. Urkullu, como viene siendo habitual, ha mantenido
la cabeza entre las piernas a la espera de que amaine, pero desde la segunda
fila, Aitor Esteban, (el del tractor y el grano), ha respondido avisando a
Rajoy de que “si da una respuesta exacerbada a Catalunya se complicará la
negociación de los Presupuestos Generales del Estado para 2018”. Previamente Erkoreka
ya había marcado que “sería irresponsable romper la colaboración con el Estado
por Cataluña” pero que se “plantearían la negociación presupuestaria si el
Estado se excede en Cataluña”. Medido, muy medido, exacerbadamente medido, en
esa segunda acepción.
Por supuesto toda postura es lícita, y hace tiempo que el PNV
ha apostado por ocupar el espacio de la derecha unionista en la CAV y para ello
no duda en adoptar sus políticas, incluida la vía xenófoba. Lo que ocurre es
que la publicidad engañosa es punible, y por ello no estaría de más que si
quieren mantener esa N entre el Partido y los Vascos sería mejor que aclararan
su significado, al fin y al cabo, negocio también empieza por N.
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